La importancia de controlar la ingesta diaria de sal

 

 

Casi todas las recetas de cocina ‘llevan una pizca de sal’. Un ingrediente que marcará parte del éxito o del fracaso de nuestros platos. Pero, cuidado. La Organización Mundial de la Salud recomienda no pasarse de la raya. De hecho, los médicos aconsejan un consumo inferior a los 5 gramos al día. Para reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares e incluso un infarto de miocardio. En este artículo de Saber Comer, vamos a analizar la importancia de controlar la ingesta diaria de sal.

 

Desmontando los mitos

 

Cuidado con asumir que la comida sin sal no tiene sabor. Existen muchas especias para condimentar tus platos. Cuanta menos sal eches, menos te acostumbrarás a ella.

Tampoco es cierto que solo tengan que vigilar su consumo las personas mayores. El exceso de sal es perjudicial para la presión arterial a cualquier edad.

No caigas en otro error frecuente: ‘La falta de sal es perjudicial para la salud’. Es cierto, pero es muy difícil que el resto de alimentos que tomamos a lo largo del día no nos aporten la cantidad diaria recomendada.

 

Consejos de la OMS

 

Existen algunos trucos que podemos implementar en casa. No echar sal por inercia a nuestros guisos y cocciones. No poner saleros en la mesa. Y reducir el consumo de aperitivos ricos en sal.

Los expertos señalan, también, la responsabilidad de los gobiernos para con la salud de sus ciudadanos. Las políticas públicas que fomentan la alimentación saludable obligan a la industria a adaptarse. Al menos eso dicen desde la OMS.

 

 

La importancia de controlar la ingesta diaria de sal reside en última instancia en nuestra salud. A los daños del corazón que nombrábamos al principio se unen otras patologías de tipo renal. El exceso de sodio no es bueno para el aparato urinario.  Por eso, en Saber Comer te animamos a que sigas todas estas recomendaciones.

 

 

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