Si por algo se caracteriza España, en lo que a gastronomía se refiere, es por nuestra popular dieta mediterránea. Pero no es la única. En este post de Saber Comer, vamos a acercarte a los secretos de la dieta atlántica. Seguiremos, para ello, las directrices de la Fundación Española del Corazón. ¿Nos acompañas?
Frutas y hortalizas
Los nutricionistas recomiendan el consumo frecuente de cítricos (limón, naranja, pomelo) y manzanas. En cuanto a los vegetales, apuestan por el repollo, la berza, los guisantes, las zanahorias, las judías y los pimientos.
Pescados
Como no podía ser de otro modo, la dieta atlántica es rica en productos marinos. Se recomienda el consumo de pescado, ya sea blanco o azul en todas sus variantes, unas tres veces por semana.
Carnes magras
Es hora de buscar las proteínas. Debes encontrar el punto medio de consumo semanal y no caer en los excesos. Mejor carnes magras y como acompañante de platos de verduras o legumbres.
Lácteos
La leche y el queso nos ayudan a obtener calcio, fósforo y vitaminas. Se recomienda su consumo habitual.
¿Un poco de vino?
Sigue siendo recomendable beber agua en abundancia para depurar el organismo y mantenerse hidratado. Una copa de vino, de vez en cuando, no tiene nada de malo.
Aceite de oliva
Aquí otro producto de ‘marca España’ para aderezar tus comidas. Tampoco hay que pasarse, con un poco para freír o aliñar es suficiente.
Ejercicio físico
Tan importante es mantener una dieta equilibrada, como realizar una buena sesión de ejercicio físico. Sal de paseo a diario o practica algún deporte.
Hasta aquí han llegado los secretos de la dieta atlántica. ¿Qué te han parecido? ¿Es mejor o peor que la dieta mediterránea? Lo importante es tener hábitos saludables. En Saber Comer, encontrarás otros muchos consejos nutricionales.
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